Con Jorge Ferraresi y Patricio Mussi a la cabeza, un grupo de jefes comunales que responden a la expresidenta tendrán su encuentro para reclamar su lugar dentro de un PJ dividido.
En medio de la convulsión que vive el peronismo en su faceta opositora y con el trono vacante de su conducción, la pata cristinista del espacio tendrá también su encuentro para marcarle la cancha al resto y buscar imponer sus nombres para dirigir el partido.
Con el intendente de Moreno, Walter Festa, quien busca desplazar al actual titular del peronismo bonaerense, el exintendente de La Matanza, Fernando Espinosa, la semana que viene una veintena de jefes comunales tendrán su cónclave para buscar definiciones a futuro.
Como contratara del encuentro organizado por el matanzero días atrás en Santa Teresita, estos intendentes buscan definir un bloque orgánico que, en base a territorialidad, imponga condiciones, algo que ya vienen realizando el grupo que lidera el hombre de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde.
Esta movida, que tiene como principales cabezas visibles al intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi y al de Berazategui, Patricio Mussi, también contará con la presencia de los jefes comunales de Ensenada, Mario Secco; de San Antonio de Areco, Francisco Durañona; y al de Pehuajó, Pablo Zurro, entre otros.
En el sindicato de las telecomunicaciones FOETRA, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, estos dirigentes darán otra muestra de cómo el peronismo está zurcado por internas y lo alejada que se encuentra la unidad para remontar fuerza en la oposición.