30-06-2015

Macri le pone la cara a la campaña del PRO en la Provincia

El jefe de Gobierno porteño se muestra junto a la fórmula conformada por María Eugenia Vidal y Daniel Salvador, en búsqueda de levantar la imagen de la dupla en territorio bonaerense.

Vidal, Macri y Regazzoni recorren Longchamps.

Vidal, Macri y Regazzoni recorren Longchamps.

A pesar de que el domingo son las elecciones generales en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, por estos días enfoca sus energías en la competencia que se da en la Provincia, con el objetivo de levantar la imagen de la dupla del PRO que conforman María Eugenia Vidal y Daniel Salvador.

En el macrismo buscan desesperadamente subir en la intención de votos, luego de las idas y vueltas que atravesó ese espacio al filo de cierre de listas, cuando Cristian Ritondo, elegido en su momento como vice, tuvo que ceder su lugar a 48 horas del anuncio al titular de la UCR bonaerense, tras un acuerdo de Macri con la cúpula del radicalismo.

Es por eso que Macri decidió pisar la Provincia para apuntalar la campaña de su elegidos, en una recorrida que la semana pasado lo tuvo por Lanús y que ahora, con timbrazos a los vecinos y diálogo cara a cara, hizo lo mismo en Glew y Longchamps, localidades de Almirante Brown.

«En la provincia de Buenos Aires también está prendiendo con mucha fuerza la esperanza del cambio», sostuvo Macri en ese distrito del sur del Conurbano, y agregó que “la gente está cansada de discursos y promesas incumplidas”.

Junto al precandidato a intendente por el PRO de Almirante Brown, Carlos Regazzoni, el jefe de Gobierno planteó que “falta presencia del Estado, hay calles de barro, no hay cloacas, faltan oportunidades de trabajo, pero la gente tiene esperanza de que se puede vivir mejor, que merece vivir mejor y apostando por el cambio que estamos construyendo entre todos”.

Por su parte, Vidal reconoció que “hay mucho para trabajar y son muy grandes las demandas que hay que atender y responder, pero la buena noticia es que se puede”.

«Hoy en la ciudad de Buenos Aires cuando llueve la gente no se angustia porque va a perder todo en una inundación, como sucede en muchos barrios que recorrimos hoy. Y eso sucede simplemente porque hicimos las obras que había que hacer y el problema se terminó”, indicó.