Luego de la visita de Barack Obama, el presidente de la Nación, Mauricio Macri, se mostró junto a la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, y anunció mejoras para las rutas argentinas.
Con la promesa de “duplicar en los próximos cuatro años las autopistas en todo el país para cuidar la vida de cientos de miles de argentinos», el presidente de la Nación, Mauricio Macri, retomó su agenda de trabajo luego de la visita de su par norteamericano, Barack Obama, con una inauguración de un puente en la localidad bonaerense de Exaltación de la Cruz.
«Acá hay un gobierno que se ocupa de resolver los temas concretos. Estas son las cosas que nos cambian la vida, las palabras pueden ser lindas pero lo que le cambia la vida a las personas son las obras», indicó el mandatario en el acto que se desarrolló en la ruta 8 y la intersección con la ruta provincial 192, que une Capilla del Señor con Luján.
Se trató de una jornada cruzada por lo simbólica, ya que en su primer día de gestión, el mandatario estuvo en el lugar para relanzar un tramo de la ruta 8. En la vuelta de hoy, estuvo acompañada por la gobernadora María Eugenia Vidal y el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, entre otras autoridades.
«El mundo nos está abriendo la mano y nos invita a trabajar juntos», precisó Macri y apuntó que, de esta manera, «habrá oportunidades de progreso» para todos los argentinos.
«Creamos en nosotros mismos. Sepamos que cuando trabajamos juntos somos capaces de hacer cosas muy buenas. El mundo nos está abriendo la mano, nos invita a trabajar juntos y estamos listos para hacerlo, porque trabajando con el resto del mundo tendremos oportunidades de progreso para todos, cumpliendo con la palabra y diciendo la verdad», agregó.
Estas promesas de obras se dan junto cuando intendentes del peronismo se mostraron a favor del pago a los buitres, tal como lo hicieron al dar luz verde para la aprobación del presupuesto provincial, una movida donde la necesidad de captar fondos es el denominador común entre los jefes comunales.
Además, se inscribe dentro del reclamo de los gobernadores que, abiertos a reiteradas reuniones en la Casa Rosada, también corren con la necesidad de hacer frente a sus urgencias financieras.