La inversión, una vez finalizado el proyecto, superará los 2,5 millones de pesos. Sirven para garantizar la genuinidad del producto.
Un nuevo laboratorio de biología molecular y aromas, que permitirá controlar la genuinidad de los vinos argentinos, fueron inaugurados en la sede central del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), en el marco del proyecto de modernización técnico operativa, con una inversión superior al millón de pesos,
La nueva infraestructura, que cuenta con la asistencia del Programa de Servicios Agrícolas Provinciales (Prosap), estará a cargo del departamento de Normas Analíticas Especiales, que depende de la Subgerencia de Investigación para la Fiscalización.
Encabezaron el acto, el presidente del INV, Guillermo García y el vicepresidente, Héctor Voena. También estuvieron presentes el subsecretario de Industria y Tecnología de Mendoza, Martín Hinojosa; el director de Asuntos Vitivinícolas de San Juan, Jorge Escobar y el director de Asuntos Vitivinícolas de Mendoza, Daniel Gallardo.
Durante el encuentro, los funcionarios destacaron el aporte del laboratorio de Biología Molecular a la infraestructura existente, ya que permitirá la identificación varietal en vid, que hasta el momento no era posible.
Esto significa que el a partir de ahora, el INV podrá determinar analíticamente el origen de un vino a nivel molecular, desde la planta hasta el producto elaborado. Inicialmente se va a trabajar con la vid y en un futuro se analizarán vinos, ya que es necesario conocer el ADN de las variedades en las plantas para luego identificarlo en los vinos.
En cuanto al equipamiento, es considerado tecnología de avanzada a nivel mundial.
El monto total en equipamiento es de $ 2.548.156, que incluye a los equipos ya instalados ($ 648.156) y los que están al llegar ($ 1.900.000). En cuanto a la refacción edilicia, el valor asciende a $ 732.645, que abarca a los laboratorios, Sala de Usos Múltiples y Sala de Reactivos.
García dijo que estas inversiones “responden al concepto de modernización del INV” y destacó la solidez de “los recursos humanos” de la organización. “La adquisición de esta tecnología nos demuestra el camino del valor agregado de la investigación. Todos estos equipos son adquiridos en el exterior en los países desarrollados, pero lo más importante es que nuestros recursos humanos ya saben qué comprar, ya saben cómo usarlos y empiezan el camino de la investigación, concluyó.