22-07-2015

Para Carrió, “el kirchnerismo tiene tres cajones de Herminio Iglesias: Scioli, Zannini y Aníbal»

La precandidata presidencial del frente Cambiemos lanzó dardos envenenados contra sus competidores.

carrio Como es habitual, la precandidata presidencial, Elisa Carrió, no tuvo pelos en la lengua al referirse no solo a los dirigentes que tiene en la vereda del frente, sino que además no mostró inconvenientes a la hora de cuestionar hasta a los propios que la acompañan en el armado de turno.

En esta oportunidad, la diputada nacional hizo alusión a un episodio ocurrido en 1983, cuando el candidato a gobernador por el peronismo en aquel entonces, Herminio Iglesias, quemó en un acto partidario un ataúd con los colores del radicalismo, lo que muchos señalan como un factor clave para entender la derrota del PJ en aquellas elecciones históricas.

A ese recuerdo hizo referencia Carrió para fustigar al kirchnerismo. «Este es el 83. Ellos tienen tres cajones de Herminio Iglesias: Scioli, Zannini y Aníbal Fernández», por lo que agregó que «viene el cambio y Cambiemos va a ganar, que nadie se preocupe, este es el 83».

Como si eso fuera poco, la dirigente se refirió al gobernador bonaerense, Daniel Scioli, en declaraciones a Radio Mitre, como un «imbécil» y  lo acusó de «arrastrarse ante el oficialismo» porque “lo único que busca es fama. Y un hombre que se humilla a sí mismo no puede defender la dignidad de la nación, porque no tiene dignidad personal».

En cuanto al compañero de la única fórmula K, Carlos Zannini, Carrió inidcó que “era un maoísta-estalinista. Les recuerdo lo que hizo Stalin, que persiguió a todos los campesinos y los mató de hambre».

A la hora de referirse al jefe de Gabinete y precandidato a gobernador, Aníbal Fernández, la diputada sacó a relucir un clásico de su repertorio al vincularlo con el narcotráfico. «La provincia de Buenos Aires va a tener que decidir si quiere que sus hijos se droguen y sean manejados por un mafioso o si va la fórmula de Cambiemos», sostuvo.

Como si esto fuera poco, también se metió con el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, puesto en el foco de la discusión luego de sus declaraciones a favor de varias políticas oficialistas. En ese sentido, Carrió expresó que “yo soy antikirchnerista, para mí esto es una dictadura. No voy a hacer demagogia, yo quiero rebaja de impuestos para la prosperidad económica; yo quiero investigar a los ladones de YPF», Sin embargo, admitió que para lograr un triunfo «tenemos que estar los tres juntos (ella, Macri y Sanz) mostrando unidad».