23-07-2016

El intendente de Tandil también patea el tablero de Cambiemos

Miguel Lunghi salió a presionar al Pro, de cara a las legislativas del año próximo. “Debemos competir con listas propias” en las Paso de la alianza gobernante, disparó.

Lungi, Macri y Vidal

Lunghi, Macri y Vidal. El intendente de Tandil apura al Pro y exige definiciones de cara a las elecciones legislativas del año próximo.

El ruido puertas adentro de Cambiemos lejos de acallarse, día tras día suma a nuevos actores que apuntan, básicamente, contra la “omnipotencia” del Pro al “tomar decisiones inconsultas” con los otros partidos que conforman el frente, el radicalismo y la Coalición Cívica, por lo menos en el escenario bonaerense.

A la dura reacción que tuvo el Comité provincia de la UCR, esta semana, que emitió un documento crítico a la incorporación de la pata peronista en Cambiemos, se sumó en igual sentido la voz del intendente “lilito” de Dolores, Camilo Etchevarren, y ahora el que sale a patear el tablero es el jefe comunal de Tandil, Miguel Lunghi, que le reclamó al Pro acelerar las conversaciones para las legislativas del año próximo y advirtió que el radicalismo debe «mantener sus principios y competir con listas propias» en las Paso de la alianza gobernante.

De todas formas, Lunghi minimizó el enojo radical por la estrategia del macrismo de incorporar a sectores del peronismo no kirchnerista a Cambiemos, reconoció que el «radicalismo está mal desde hace bastante tiempo» y evaluó que las próximas elecciones deben marcar el camino para la «recuperación» del partido en la estratégica provincia de Buenos Aires.

«Tenemos que ponernos de pie, hacernos fuerte y colaborar en el espacio que estamos», dijo el Intendente, quien consideró que la UCR debe «mantener sus principios» doctrinarios y competir en las primarias de Cambiemos con «listas propias».

«Nosotros vamos a mantener nuestro principios e iremos al espacio a competir el año que viene. La gente nos votará o nos dejará afuera y tendremos que mejorar», aseveró Lunghi en relación a la estrategia electoral que debería plantearse el radicalismo para el 2017, aunque reconoció que «no todos tienen la misma postura» en el centenario partido.

De esta manera, Lunghi se puso en linea con la advertencia lanzada por buena parte de los 40 jefes comunales que la UCR posee en la Provincia, tras la inclusión en el gabinete de María Eugenia Vidal del exmassista Joaquín de la Torre y del pase a las filas del oficialismo de los intendentes peronistas Hernán Bertellys (Azul) e Ismael Passaglia (San Nicolás).

En una declaración impulsada por su titular Ricardo Alfonsín el Comité Provincia expresó el martes pasado su malestar por la decisión “inconsulta” del Pro de sumar a otras fuerzas a Cambiemos “sin la debida participación del resto de las fuerzas” y reclamaron la constitución de una “mesa de diálogo” para debatir distintos temas y que la UCR sea tenida en cuenta a la hora de tomar decisiones.

Con todo, el intendente de Tandil aseguró que el «presidente Mauricio Macri tiene la potestad de manejar el Ejecutivo», aunque revindicó el derecho del radicalismo a «debatir» aquellas medidas con las que no están de acuerdo.

«Somos una coalición política parlamentaria, lo que está bien lo aplaudimos y lo que vemos mal lo debatimos en forma democrática», reflexionó Lunghi, quien reclamó al Pro acelerar las conversaciones en torno al armado de Cambiemos para las legislativas del año próximo porque «los meses corren y el 2017 está a la vuelta de la esquina».

Consultado sobre el rumbo del Gobierno Lunghi evaluó que el «país no está bien», aseguró que las «provincias e intendencias están con muchos problemas» y consideró que la administración de Macri «cometió errores pero trata de enderezar el barco».

«Hay gente que está mal, no llega a fin de mes, la inflación no se ha podido parar y las tarifas son muy fuertes», evaluó, aunque destacó la voluntad del Ejecutivo de «decir la verdad y no mentir con la inflación del Indec y exhortó a «poner el hombro, sin color político» para enfrentar una situación económica y social que «no es fácil».

Por último, el intendente de Tandil reclamó a «los que se llevaron puesto al país tener un poco respeto y opinar menos».