El diputado nacional volvió a la carga contra estos dirigentes, y señaló que va a ganar la Provincia “con mis valores y con mi experiencia de gestión”.
La interna dentro del Frente Renovador para competir por la Provincia está al rojo vivo. Candidatos que llegan, otros que se van y algunos que juegan al misterio llenan de picante esta disputa dentro del partido que lidera Sergio Massa.
Uno de estos dirigentes que se anotó para quedarse con la Gobernación es el diputado nacional Darío Giustozzi, quien desde hace tiempo viene mostrando cierto malestar ante la forma que adoptó esta competencia en el massismo.
“Yo sostengo lo mismo que representamos en el 2013: una fuerza nueva, renovadora. Voy a ser gobernador de la provincia de Buenos Aires con mis valores y con mi experiencia de gestión”, planteó el exintendente de Almirante Brown.
Siguiendo esa línea, luego del reproche del propio Massa luego de que trascendiera la posibilidad de una maniobra entre el diputado y el ministro del Interior de la Nación, Florencio randazzo, fue Giustozzi el que mostró los dientes, y los destinatarios del gesto fueron nuevamente Martín Insaurralde y Francisco De Narváez
En referencia al intendente de Lomas de Zamora, lanzó que “no sé por dónde anda. Vi una foto en Pinamar, otra en la Polinesia…Y sus declaraciones en su último reportaje sobre su pertenencia al oficialismo me exime de mayores comentarios”.
Con el ganador de las elecciones legislativas de 2009 fue un tiro por elevación ya que, sin mencionarlo, el legislador sostuvo que “hay dirigentes que tienen más trayectoria en la TV que trabajando con la gente. La superficialidad y la frivolidad quedan al desnudo”.
Luego de estas consideraciones, Giustozzi aclaró que “este año será necesario elegir como si se tratara de un cirujano que va a operar a un ser querido. Evaluar la trayectoria, con un debate jerarquizado. Hay que cuidar lo que está bien hecho, modificar lo que está mal y hacer lo que falta”.
“Hay una camada de dirigentes, tanto del oficialismo como de la oposición, que lo único que ha hecho en el último tiempo parece ser pensando en destruir más que en construir y la gente nos reclama que seamos capaces de construir. Sin descalificaciones y sin simulaciones”, puntualizó.