En un operativo contra el robo de energía, detectaron “propiedades de lujo” conectadas en directo a la red. Están ubicadas en uno de los desarrollos urbanísticos más antiguos e importantes de Brandsen.
Acceso al barrio privado de chacras de Brandsen a donde detectaron 38 casas de lujo conectadas ilegalmente a la red eléctrica. (Foto: Prensa Edelap).
Otra sorpresa mayúscula – o quizá ya nada los sorprende- tuvieron los técnicos de la empresa Edelap que en las últimas horas hicieron un operativo contra el robo de energía en un tradicional y coqueto barrio privado de chacras a orilla del río Samborombón, en Coronel Brandsen, al descubrir que “38 propiedades de lujo” estaban colgadas de la luz.
Edelap informó que las casas detectadas “consumiendo ilegalmente energía” están ubicadas en uno de los desarrollos urbanísticos “más antiguos e importantes de Brandsen”.
Detalló que las propiedades de “grandes dimensiones, que por sus instalaciones realizan un consumo eléctrico elevado, estaban conectadas de forma clandestina a la red” del barrio residencial “Estancia Las Malvinas”, complejo que se desarrolla sobre 2.000 hectáreas con ocho kilómetros de costa sobre el río Samborombón.
A mediados de abril, en otra acción contra el robo de energía, 9 propiedades de alta gama situadas en un country de City Bell, también fueron descubiertas con conexiones clandestinas directas.
En esa oportunidad los técnicos de Edelap cortaron el servicio irregular de las “mansiones” conectadas a las redes de forma ilegal, todas ellas emplazadas en el barrio cerrado “El Cauce” (476 y 132), a muy pocas cuadras de una zona residencial conocida como “Plaza La Emilia”, que en rigor está ubicada en Cantilo (473) entre 132 bis y 173.
EL OPERATIVO EN BRANDSEN.- Edelap puntualizó que “en todos los casos se labraron actas, se retiraron las conexiones peligrosas y evalúa realizar la denuncia penal” de los 38 usuarios detectados de manera clandestina, y también apuntó contra quienes “ofrecen el servicio de conexiones ilegales y distintas maniobras para manipular las instalaciones eléctricas”.
“El robo de energía – delito penado con prisión de hasta 6 años- genera excesos de consumo no registrado que sobrecargan los tendidos, los dañan y afectan la calidad de servicio que reciben los usuarios vecinos que están correctamente conectados”, reseñó.
Las conexiones ilegales también generan “problemas de tensión o cortes por manipulación indebida de las redes”, advirtió Edelap, que distribuye energía a 365 mil usuarios de su zona de concesión (La Plata, Berisso, Ensenada, Magdalena, Punta Indio y Brandsen).
“La empresa procederá a efectuar el cobro de la energía consumida en forma ilegal a los propietarios de los inmuebles involucrados, incluyendo las penalidades correspondientes conforme lo establece el Reglamento de Suministro y Conexión”, indicó.
Además, se evalúa “denunciarlos penalmente así como a quienes pudieran haberse ofrecido a realizar las conexiones ilegales o distintas maniobras para manipular las instalaciones eléctricas”, amplió el comunicado de Edelap, una empresa que integra del grupo DESA que gestiona tres concesiones más en la Provincia: Edea, Eden y Edes, y Edesa en Salta.