También fue sorprendido un centro cultural. Todos estaban colgados de la luz con conexiones clandestinas. Ahora, serán denunciados ante la Justicia penal y la empresa les cobrará los consumos irregulares.
Cuatro obras de edificios en construcción en el casco urbano de la Ciudad; dos cervecerías; un centro cultural; un almacén; una barbería; una hamburguesería; y un frigorífico, fueron sorprendidos con conexiones clandestinas robando energía de la red por la brigada anti fraude de Edelap y ahora serán denunciados ante la Justicia penal y la empresa les cobrará les cobrará los consumo irregulares más las penalidades correspondientes.
El operativo que desplegó Edelap logró identificar once «conexiones ilegales que afectan la calidad de servicio que reciben los usuarios y generan peligro para la comunidad”, puntualizó la empresa.
“Personal de la empresa, capacitado y con elementos para descubrir todo tipo de intervenciones clandestinas en las redes, realiza revisiones frecuentes, incluso durante la noche, desarticulando conexiones irregulares y labrando actas con escribana que derivan en acciones penales contra los infractores”, explicó Edelap en un comunicado.
Durante los procedimientos, los operarios de la empresa detectaron conexiones ilegales en distintas obras en construcción y descubrieron el robo de energía “mediante manipulación peligrosa de la red” en los edificios ubicados en la zona de 32 y 15; 35 y 25; 26 y 38; y 59 y 25.
Asimismo, como resultado de un operativo nocturno, se identificaron conexiones clandestinas en una cervecería, un centro cultural, un almacén y una pizzería de la zona de calle 3 a 5 y de 63 a 64. Además, se labraron actas en cervecerías ubicadas en los alrededores de 13 y 40, y 25 y 495; en la barbería y en una casa de venta de hamburguesas de las proximidades de 7 y 520; y en un frigorífico ubicado alrededor de diagonal 73 y 2.
“El robo de energía, en sus distintas metodologías, genera excesos de consumo no registrado que sobrecargan los tendidos, los dañan y generan una disminución en la calidad de servicio que reciben los usuarios que están correctamente conectados, generando problemas de tensión o cortes por manipulación indebida de las redes”, amplió Edelap.
La empresa anunció que cobrará “la energía consumida en forma ilegal a los usuarios involucrados, incluyendo las penalidades correspondientes conforme lo establece el Reglamento de Suministro y Conexión”.
Advirtió además que “denunciará penalmente a los usuarios que fueron detectados con estas conexiones clandestinas y a quiénes ofrecen el servicio de conexiones ilegales y distintas maniobras para manipular las instalaciones eléctricas”.
El robo de energía es un delito penado con prisión de hasta 6 años, que además pone en riesgo la vida de quien la manipula y de terceros, perjudicando asimismo la calidad del servicio eléctrico.
Edelap, integrante del grupo DESA (gestiona otras tres concesiones en la Provincia: Edea, Eden y Edes; además de Edesa en Salta), distribuye energía a 365 mil usuarios en su zona de influencia, compuesta por los partidos de La Plata, Berisso, Ensenada, Magdalena, Punta Indio y Brandsen.