Mauricio Macri, Sergio Massa, Margarita Stolbizer y Ernesto Sanz atacaron al oficialismo después de los episodios desatados tras las elecciones en Tucumán. Chicana entre el líder del Frente Renovador y el del PRO.
En la continuidad de las repercusiones desatadas tras las episodios de violencia que tuvieron lugar durante y después de las elecciones en Tucumán, los candidatos presidenciales opositores Mauricio Macri, Sergio Massa y Margarita Stolbizer, se mostraron junto al candidato a gobernador tucumano que enfrentó al oficialismo, José Cano, para criticar la postura del oficialismo luego de esos hechos.
Cano fue el primero que tomó la palabra y subrayó que «acá no está en juego quién ganó o perdió una elección. Es necesario garantizar a la sociedad un sistema que garantice la transparencia. La voluntad popular tiene que ser garantizada por el Estado y no porque una fuerza fiscalice de mejor o peor manera», y agregó que “lo que los tucumanos reclaman en la plaza no es que gane tal o cual candidato, es que nadie les cercene el derecho de elegir».
Acto seguido, Macri hizo referencia a las palabras de rechazo a la quema de urnas encabezada por el dirigente gastronómico Luis Barrionuevo en los comicios de Catamarca en 2003 pronunciadas en el Congreso por Cristina Fernández de Kirchner, y resaltó que “hay que garantizar la transparencia en Tucumán y sobre todo en las elecciones que vienen”.
“Les digo a la Presidente Cristina Kirchner y al candidato Daniel Scioli que estamos en medio de un proceso electoral desordenado por la multiplicidad de elecciones, y eso es parte del problema. Este sistema está agotado. No es cuestión de quién tiene los fiscales más fuertes o más malos. Hay que expresar las ideas y que la gente pueda elegir por qué camino quiere seguir recorriendo el futuro”, agregó.
Stolbizer, por su parte, remarcó que «estamos ante un hecho de extrema gravedad que pone en evidencia un sistema feudal que comienza con la corrupción, la práctica clientelar, el fraude y la represión. Ese combo venimos a denunciar».
Massa, en tanto, exigió que «Tucumán sea la piedra fundacional de un proceso que permita consolidar aquellas cosas que queremos construir para la Argentina del futuro», y expresó que «si tomamos la decisión y en una semana cambiamos sistemas jubilatorios o de inteligencia, podemos encarar el 25 de octubre con un profundo cambio que devuelva a los argentinos su confianza en el proceso electoral».
El cuadro fue completado por el presidente de la Unión Cívica Radical (UCR), Ernesto Sanz, pero no tomó la palabra.
Más allá de este gesto de unidad, también hubo tiempo para el fuego cruzado entre los candidatos opositores. Luego de que Macri esquivara una pregunta acerca de su posición en caso de un posible ballotage, el líder del Frente Renovador sostuvo que “no voy a esquivar el bulto como hizo Mauricio. Espero que si me toca estar en la segunda vuelta, Mauricio me acompañe y Margarita también».
Luego de estas palabras, el referente del PRO tomó el micrófono y señaló: «Qué bueno, porque dicen que en la vida el que aspira, concede; así que es bueno para nosotros».