24-08-2014

La sutileza de Karina y la vehemencia de “Andresito”

La estrategia de Daniel Scioli para desembarcar en Balcarce 50 incluye, como es obvio y recurrente, la fuerte presencia de su esposa, Karina Rabolini, que desde la presidencia de la Fundación Banco Provincia desarrolla una nutrida actividad que traspasa las fronteras del primer Estado argentino y llega a lugares tan distantes como Misiones, donde el sábado entregó anteojos a alumnos de escuelas primarias de la localidad de Andresito.

La presidenta de la Fundación Banco Provincia, Karina Rabolini, entregó anteojos a alumnos de escuelas primarias de la localidad de Andresito, en Misiones.

La presidenta de la Fundación Banco Provincia, Karina Rabolini, entregó anteojos a alumnos de escuelas primarias de la localidad de Andresito, en Misiones.

Con la excusa del programa solidario “Una mirada para los niños”, la candidata a primera dama de la Nación Argentina, estuvo en la provincia de la tierra colorada cumpliendo con el rol que le cabe en la campaña presidencial de su esposo, que está vez compartió la gira.

Karina estaba acompañada por la gerenta de la Fundación, Soledad Peralta, quien suele ser su sombra en el raid por el interior del país, y por el intendente de Andresito, Bruno Beck. «Este es un trabajo que venimos haciendo hace mucho tiempo con mucho amor para las familias en situaciones difíciles», dijo emocionada la exmodelo.

Toda la sutileza que se empeña en reflejar la campaña que tiene a la esposa del Gobernador bonaerense como protagonista, sin embargo chocó ayer con la vehemencia militante del jefe comunal local: «Ojalá en diciembre de 2015, Karina sea la primera dama de la Argentina», sentenció al clausurar la entrega de lentes.

Karina remató su gira por Andresito al son de una chacarera, que bailó con un chico de una escuela del lugar, y como en un cuento de hadas se fue soñando con el zapato de cristal que significa dar el soñado salto de primera dama provincial a nacional.