De cara al ballotage, el gobernador bonaerense aseguró que quiere «escuchar las ideas» del diputado nacional, quien le contestó que la gente “no quiere continuidad».
No pasaron 48 horas de las elecciones generales del domingo que tanto Daniel Scioli como Mauricio Macri ya estan a pleno en una disputa para quedarse con los votos que les permitan alcanzar la presidencia en el ballotage del 22 de noviembre, una movida en la que también Sergio Massa juega un papel principal.
En un complejo ajedrez, los competidores buscarán de la forma que sea ganar terreno, casi de la forma que sea, y para eso ya comenzaron a desplegar movimientos para uno y otro lado.
En ese sentido, Daniel Scioli, sobre quien trascendió que le habría ofrecido puestos destacados a los massistas Roberto Lavagna y José Manuel De la Sota, busca casi en forma desesperada captar la atención del líder de Frente Renovador.
«Sergio ha mostrado una gran tenacidad para defender sus ideas y yo las voy a escuchar. Son 5 millones de votos que lo acompañaron en las elecciones», indicó el gobernador bonaerense, quien agregó que «el electorado nos exige cada vez más. Entiendo e interpreto ese voto. Muchos de ellos habían pertenecido a nuestras políticas y luego encontraron en Sergio el espacio que necesitaban. Pero muchos volvieron».
Sin embargo, el propio Massa fue tajante y parece estar decidido a pasarle factura al exmotonauta por los acuerdos rotos de años atrás. Sin decirlo expresamente, comenzó a delinear hacia dónde irán sus preferencias de cara a la segunda vuelta.
«El domingo la gente dijo que no quiere continuidad», indico el excandidato presidencial del frente UNA, y lanzó: «Mientras Scioli no sea el líder de su fuerza política no puede gobernar nada. Tiene que dejar de ser empleado de Cristina».
Y en medio de este clima enrarecido, el que busca aprovechar la ventaja es Macri, y reconoció que «estuvimos chateando con Massa y De la Sota», en su plan de «dialogar con todos los sectores».